El tiempo adulto

Dicen que los 30's son los nuevos 20 pero con dinero, lo que no dicen es que el costo de nuestro tiempo libre es caro, entre desvelos y estrés, nuestras mentes empiezan a deteriorarse observando aquellos sueños que quedaron guardados en las libretas de la universidad. Algunos tienen la delicadeza de ir a terapia para darle al mundo la mejor versión de ellos mismos. Otros más se aferran a mantener vivo a su niño interior que esta en peligro de extinción con videojuegos y alcohol.

Y cuando parece que todo está perdido, la llama del amor mantiene nuestra cordura. Con hijos, pareja o mascotas, las crisis existenciales pueden durar un fin de semana, una madrugada o lo que dura el agua caliente en la regadera, pero no más. Llegar tarde al trabajo son lujos que a esta edad no nos podemos dar. No seas tan duro contigo si los objetivos de inicio de año no se han cumplido. Lo más importante en esta ratonera llamada vida es divertirse en el camino, no necesariamente la meta. Sé valiente con tus sueños, ama sin medida aquello que te hace feliz y si tienes a tu lado a alguien con quien compartir, observa su risa cuando salgas del trabajo, cuéntale el detalle más absurdo de tu día, dibuja una cara graciosa en ti o hazle cosquillas. Cualquier cosa que le haga saber que estas vivo funciona, sea un animal, un bebé o pareja, tu cuéntale todo, la locura es un estado mental que pocos nos damos el permiso de experimentar. Esta edad acelera tanto el tiempo que cuando menos te das cuenta las canas en tu cabeza y las arrugas en tu cara irrumpen tu paz. Conservar la calma es un buen consejo pero lucir tus señales de envejecimiento es mucho mejor. Nosotros no estaremos sentados en el sofá viendo la tele, seguiremos enojados por los impuestos que nos han quitado y no se ven reflejados, basta con mirar el metro de la ciudad, después de todo para qué arreglarlo si podemos construir cablebús por todos lados u otra ruta del metrobús. Es probable que a los 60 sigamos aferrados al gimnasio o a alguna vía de escape que nos haga olvidar nuestra vejez. Tal vez compremos motos caras, sigamos saliendo de viaje o nos pintemos el cabello de colores exuberantes. No importa, nuestra generación ha marcado la pauta para alzar la voz, no podría ser diferente en el futuro. Este es el tiempo de adulto, si invertiste bien tu tiempo en los primeros 30 años de la adolescencia debes pasarla bien ahora pero si no, es probable que la quincena no te dure ni una caguama, en cuyo caso, siéntete afortunado, perteneces al heroico cuerpo de chavorrucos nacional. Dicen que lo mejor esta por venir, ya veremos. Feliz vejez.