Visitas de la última semana a la página

martes, 24 de agosto de 2021

¿Destino? Basado en hechos reales

El siguiente texto es una historia real de amor sobre dos personas que se amaron desde que se conocieron, es una colaboración con alguien a quien aprecio mucho y agradezco que me haya compartido un pedacito de su corazón...

Hace un par de años en un evento de índole político y social, bastante aburrido, noté tu presencia. Estabas ahí sentado, tranquilo, bastante guapo, por cierto...

¡Ay Dios! ¿De dónde sacaste tanta perfección? Te observaba detenidamente. Lo hice durante más de 12 horas en intervalos pequeños, parece atemorizante ¿No? Realmente ni yo podía entender el motivo que me hacía mirarte sin detenerme. Te diste cuenta muy pronto pero eras tan serio y estabas tan concentrado en lo que hacías que no habías notado que llevaba observándote en minutos pausados durante bastante tiempo. Tu entrega e interés a lo que realizabas no te permitía voltear a verme o que pudieras responderme una sola de todas las sonrisas que guardabas en ti. De repente volteabas con inquietud y con mucha pena medio sonreías lentamente. Hubo un momento en el que me miraste fijamente a los ojos y entre más me concentraba en mirarte tus mejillas se tornaban de una tonalidad rojiza preciosa,pero estabas más preocupado por otras cosas que por mirarme; Yo no tenía nada más interesante que hacer más que observar cada uno de tus movimientos. Cuando menos me dí cuenta el día había acabado, ya era de noche, estaba muy oscuro y mi jornada en el lugar había terminado. Tu te quedaste ahí un rato más, te veías un poco agotado,en fin, nunca pensé que ese día se quedará tan marcado y presente en mi vida, realmente jamás pensé volverte a ver, no sabía nada de ti, solo que estabas ahí existiendo en alguna parte del mundo quizá haciendo feliz a alguien más. ¿Cómo saberlo? Te observé tanto que podía notar que toda la tarde mirabas tu móvil cada 15 minutos aproximadamente,como esperando respuesta de algo o alguien que inquietaba tu mente,cuerpo y ser. Sonreías cada que revisabas algo, probablemente existía alguien causante de tu sonrisa o quizá no,tal vez mirabas facebook, Instagram o ese tipo de tecnología que todos utilizan hoy en día. Moría por acercarme a ti y saber tu nombre, pero no lo conseguí, sentí demasiada pena al ver la belleza de tu rostro, la forma que tenía tu nariz, ojos, cejas y lo despeinado que estaba tu cabello por la agotante jornada que habíamos pasado ahí. Tan cerca pero al mismo tiempo tan lejos, no podía creer que tanta perfección pudiera estar a tan solo unos metros de distancia de mí. Moría por invitarte algo de beber o comer y seguido a eso robarte un beso largo y morder tu labio, tenía miedo a que pensarás que estaba loca, aunque realmente lo estoy, solo que no sabría que pretexto inventar para no quedar como una psicópata que te había estado observando casi por un día completo. Así que me resigné a dejar de verte. Fui a casa y ya no pude ir tras de ti como quería. Afortunadamente conocíamos a algunas personas en común y pensé en preguntar por ti al día siguiente, no encontrando repuesta alguna comencé a frustrarme y arrepentirme por no haberme acercado a ti esa tarde. Te busque por todos lados y parecía ser que al chico misterio nadie lo había visto. Ahora que lo pienso ni siquiera sabía tu nombre, nada me daba una pista sobre quién eras, dónde vivías, tu número de móvil, nada de nada, jamás me rendí, para ser sincera, no había un día en que no pensara en que sería de ti, sin respuesta deje de buscarte hasta que tiempo después por casualidad en una conversación con una chica supe tu nombre, pero no tu apellido, te encontré gracias a las redes sociales que tanto odio, no me acuerdo exactamente cómo fue que sucedió, solo sé que sentí una explosión de emociones en el alma por poder tener una oportunidad de saber quién eras con algo más de profundidad. Para mi sorpresa me escribiste e iniciamos una charla bastante normal, pero sin razón alguna un día dejaste de contestar a mis mensajes y me eliminaste de tu red social. Sentí una tristeza horrible, pero entendí que no era nuestro momento, así que paso bastante tiempo sin saber de ti.

Mucho tiempo después, tres largos años y como diez meses, me volví a preguntar por ti. Realmente nunca imaginé volver a verte, pero era tanta mi curiosidad que te busque una vez más en las redes sociales, me aceptaste pero no escribías nada. Moría por preguntar qué había sucedido o por qué me habías borrado de tus redes, solo suspiré y me reservé. Una mañana bastante complicada para mí recibí un ¡Hola! ¿Como estás? Y mi corazón latió con bastante fuerza, nunca pensé que en un momento tan catastrófico de mi vida iba a recibir un mensaje tuyo que nos llevaría a una larga conversación sobre cosas que habían pasado en nuestras vidas, se me vinieron a la cabeza un par de situaciones y salidas a tu lado mientras mi corazón latía acelerado en cada una de las miradas y sonrisas que compartíamos en mi mente.

Dicen que el amor te encuentra, justo a la hora y en el momento indicado, así que yo estaba confiando en lo que el destino preparara para mí. Sin darme cuenta llevábamos chateando varios días y teníamos una cita en el cine, pasaste por mí. Llegando al sitio charlamos mucho. Mientras me mirabas ni nos dimos cuenta que torpemente nos habíamos olvidado de la función, reímos y entramos a la sala, me ofreciste tiernamente tu brazo para que estuviese más cómoda, cuando menos me dí cuenta tu boca estaba tan cerca de la mía, mis mejillas tomaron un color rosado intenso y reí de vergüenza, pero no pude negarme a tanta ternura que emanabas tan cerca de mi. Así que correspondí a tu beso y volé sin necesidad de despegar los pies de la tierra. Estaba nerviosa y mi respiración era diversa, los latidos de mi corazón cada vez eran más intensos. En ese momento supe que había valido todo tiempo y la espera por ti, por volver a verte ya que tal vez era el inicio de una nueva historia ¿De amor, amistad, pasión? No lo podía saber, solo sabía que dejaría que la vida me llevara junto contigo a donde quisiera que estuviésemos. Estaba confiando en la magia del universo y en las casualidades y causalidades de la vida para emprender este nuevo y largo viaje llamado vida o destino. Eras tan lindo y atento conmigo que no sabía si tus palabras me invitaban a que me amaras, cuidaras y apoyaras para que fuese una mejor persona o tal vez estabas invitándome a hacer una vida juntos. Seguramente estaba exagerando y alucinando las cosas,en fin, todo pasaría en el momento exacto como todo lo que no se planea en la vida. Al día de hoy solo agradezco mi perserverancia por no rendirme contigo y al universo por hacer una alineación para volverte a encontrar.



A. J. Baez.

 



No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Inserte su frase favorita:

Hombre de campo

Este es un homenaje para los hombres que tuvieron que ahogar sus tristezas en los lugares que estaban permitidos, cuando ir a terapia no era...

Acerca de mí

Mi foto
Me apasiona escribir y compartir mis emociones y pensamientos con los demás, pienso que eso enriquece mi propio aprendizaje, soy alguien con una mente curiosa y tenaz.