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lunes, 25 de octubre de 2021

Oscuridad

Bendita oscuridad, que en tus alas caemos cada día al dormir y nos despedimos al despertar. Ven a mí de nuevo que quiero evolucionar. Tan temida como una pesadilla, tan odiada como un acto de cobardía, ven a poseerme de ira.

Parece que la gente olvida y olvida rápido sin cesar. Que para que exista la luz debe existir la oscuridad.

Ven y cubre mi alma de ti, ven y enséñame a atravesar las difíciles pruebas que solo los guerreros de la luz se atreverían a sentir.

Dejo de negarte para honrarte e integrarte. Contigo renace una mejor versión de mi. Mi capullo de oruga que da forma a mis alas de luz y libertad, dame el placer de errar. Cuando me hayas mostrado mis áreas de oportunidad, ve a dónde debas ir, sé negada y temida por aquellos que no saben nada de ti. 

Los fanáticos, los soberbios, los que se dicen benditos, los que nunca fracasan delante de la gente, los que lo saben todo sin saber nada, aparentemente. Los ricos de palabras y pobres de sabiduría. Ve con quién no te conozca, con quién jure nunca tener malos días, los que siempre están de buenas y nunca tropiezan. Muéstrales que son las heridas del alma lo que nos une como humanidad, muéstrales que en las caídas se encuentra la verdadera humildad.

Y cuando te reconozcan como parte inherente de la luz, abre sus caminos a la paz. Es necesario sentir la derrota en tus manos para cambiar. Es necesaria la noche más oscura para sentir el éxtasis del alba en nuestra faz. 



lunes, 18 de octubre de 2021

Homenaje a mi pasado

Parece que fue ayer cuando lloraba solo en mi cuarto de 2x6, parecía que lo tenia todo pero estaba harto de ver lo mismo una y otra vez.

Un agujero negro que fusionaba mi cerebro con mi cuerpo, sonrisas falsas rodaban por mi rostro, una bomba de tiempo que explotó en el peor momento. Hace tiempo que no veo el espejo del mismo modo, hace tiempo que dejé en el pasado todo ese lodo. Tuve que hacer una introspección profunda para sacar lo que ya no servía. La basura inmunda que gritaba fuerte en mi mente que nada de lo que tenía lo merecía. Por única vez recurrí a mi padre, que cuando enfermó tuve en bien acercarme; cuando mejoró me pidió más dinero del que podía darle. Mi corazón de nuevo se rompió, en un abrir y cerrar de ojos mi ser colapsó. ¿Dónde estás abuelito? Hoy mas que nunca necesito un abrazo tuyo y un café calientito.
 
Parece que fue ayer cuando lloraba solo en mi cuarto de 2x6, parecía que lo tenia todo pero estaba harto de ver lo mismo una y otra vez.

Conocí un amor fugaz, la luz en mi camino que me enseñó a valorar, entre las tormentas y el dolor, su amor me sacó de una profunda depresión. Me dio la fuerza para andar, me dio energía para sanar y también me dió su ausencia para recordar, que los amores eternos son los más breves en realidad, que los amores puros se marchan en paz. Si no fuera por ella yo seguiría igual, si no fuera por ella habría olvidado lo que se siente tocar el cielo teniendo un cuerpo terrenal. Donde quiera que estés, mi corazón, recuerda que un pedazo de mi alma cuidará de ti sin razón, nos encontraremos en el infinito cuando en esta vida hayamos terminado nuestra misión.

Parece que fue ayer cuando lloraba solo en mi cuarto de 2x6, parecía que lo tenia todo pero estaba harto de ver lo mismo una y otra vez.

Para vivir hay que morir, tuve que matar esa versión de mí para poder salir de ahí. Tuve que despojarme de todo, tuve que vaciarme y entregar mi odio. Me costó trabajo y sigo en la lucha, me enorgullece haber llegado tan lejos poniéndome trucha. Sentía que moría pero solo era mi corazón purificandose en aquellos días. Me falta mucho por recorrer, soy un servidor más que ha recuperado la fe. Soy un hombre bueno que cayó una vez y que con tiempo se ha logrado fortalecer. Gracias a mis padres que me han dado el ejemplo, sobre qué debo y no debo hacer, gracias a mis amigos por estar conmigo en los momentos de tristeza y también en los de placer. Gracias a mí colibrí por darme la voluntad para levantarme otra vez y gracias a la vida por regalarme un nuevo amanecer.








lunes, 11 de octubre de 2021

Mereces un amor.

Te mereces un amor sano, lleno de comprensión, respeto, paz, tranquilidad, pero sobre todo de madurez.


Te mereces un amor que vea en ti algo más que un aspecto físico, que note tu inteligencia, calidez, virtudes y defectos y se enorgullezca de cada una de las cosas que te hacen ser tú. Mereces un amor que acepte todo lo bueno que eres pero en lo malo te ayude a mejorar con amor y paciencia.


Mereces un amor que apoye tus sueños, metas o ambiciones, alguien que te impulse, crea en ti, que te inspire, que no suelte tu mano en la adversidad ni dude de tus capacidades ni de tu amor.


Mereces un amor que no te genere más inseguridades si no que te ayude a combatir cada una de ellas, mereces un amor que te saque millones de sonrisas con solo una mirada, palabra o acción, que crea que eres suficiente a pesar de no ser perfecto, mereces un amor incondicional, sincero, pero dispuesto a mejorar y siempre dar todo por ti.


Mereces un amor real, un amor que luche día con día por estar a tu lado a pesar de los malos ratos, obstáculos o diferencias a presentar. Que busque siempre soluciones para estar cerca de ti porque sabe que vales la pena, eres suficiente y que sus almas conectan a la perfección. Mereces un amor que te permita fluir pero sobretodo que fluya contigo.


Mereces un amor que te mire como si no existiera nadie más en el mundo, que te abrace cuando no lo esperas y te lleve a sus lugares favoritos, que comparta contigo sus platillos y te haga reír hasta llorar. Mereces un amor que te trate como un ser humano, de forma amorosa. Que te presuma en cada oportunidad, que tome tu mano en la calle y sonría mientras le cuentas tu día. Que te consuele cuando las cosas no sean como esperas, que no huya cuando las cosas parezcan perdidas y te ayude a crecer en esas tormentas. Mereces un amor que quiera aprender de ti, que crea que cada parte tuya es asombrosa, que desee ser tu cómplice.

Un amor compañero, un amor valiente, un amor guerrero.



lunes, 4 de octubre de 2021

Sahasrara

Después de recorrer el camino de los seis chakras anteriores, nos encontramos con el punto energético que se ubica en la parte superior de nuestra cabeza. La literatura dice que con este chakra abierto puedes alcanzar la iluminación eterna y la union del ser en todo su esplendor. En mi experiencia encuentras un tesoro más valioso que toda la sabiduría del mundo. 

Cuando comencé mi camino espiritual lo hice con el fin de encontrar paz y tranquilidad en mi mente, solo fue eso. Buscaba dejar a un lado el exceso de estrés y las tristezas que me agobiaban en aquel entonces. Buscando una forma de alcanzar ese estado de paz encontré diversas meditaciones, también fui a terapia psicológica tradicional y a algún retiro espiritual. Todo esto me llevó a una gran verdad; habito mi cuerpo, cada conflicto que pensé que tenía con el mundo era un conflicto conmigo mismo en realidad. Desde un miedo arraigado en el pasado, un momento vergonzoso o una culpa que no me dejaba avanzar. Todos esos momentos grabados en mi memoria que condicionaron mi conducta los tuve que enfrentar. 

Dicen que la religión es para las personas que no quieren ir al infierno pero la espiritualidad es para aquellos que ya han estado en él. Coincido con estas palabras porque he aprendido que la espiritualidad no se trata de "vibrar alto todo el tiempo", mantener una sonrisa todo el día e ignorar los momentos difíciles de la vida. Para mí, la espiritualidad se trata de mantener la calma durante una tormenta y para eso debo conocerme a mi mismo. Saber cuáles son mis áreas de oportunidad que me impiden mantener esa calma. 

Tomando todo lo anterior en cuenta. El séptimo punto energético de nuestro cuerpo es la culminación del autoconocimiento. Es encontrar la paz con nuestro juez más severo, nosotros mismos. No es un estado al que se llega y ya; es un camino que elegimos recorrer. Hay situaciones y momentos que son particularmente más difíciles de sobrellevar que otros, es ahí donde debemos prestar atención, tratar de observar esas situaciones como lecciones y continuar avanzando.

Las cosas son valoradas solo cuando están ausentes. La paz mental y la tranquilidad en nuestras emociones se vuelve algo sumamente importante cuando no se tienen o se han perdido. Actualmente los ataques de pánico o ansiedad se han vuelto el pan de cada día. También son la oportunidad de emprendimiento para muchas personas que descubrieron la forma de lidiar con sus emociones. Creen ahora que todos los demás actuamos y respondemos de la misma manera. Somos humanos que reaccionamos a distintos estímulos. Algunos con la naturaleza obtienen la anhelada paz, algunos en sus casas leyendo libros, tejiendo o escribiendo. Por esta razón creo firmemente que es complicado enseñar a otros a encontrar su propia paz ya que es un camino tan personal como nuestra huella digital.

La señal más clara que hay para saber si el chakra de la corona está equilibrado, desde mi experiencia, es observar si en nuestro ser hay paz. Paz con el exceso de tránsito camino al trabajo o de regreso a casa, con las personas que caminan despacio en el transporte público, paz con el helado que se ha caído al suelo por accidente o el rechazo de la persona que te atrae después de haber confesado tus intenciones. Paz con las decisiones de tus padres para educarte, para quedarse o marcharse, paz con tu pasado, paz con nuestras propias decisiones. A cierta edad dejamos de buscar una aventura que ayude a desbordar adrenalina en todo el cuerpo para dedicarnos a encontrar actividades que nos devuelvan la tranquilidad que la vida cotidiana nos arrebata, buscamos el tesoro que aguarda el séptimo chakra, la paz. Busca la paz en tu corazón, esa es la verdadera iluminación.



Hombre de campo

Este es un homenaje para los hombres que tuvieron que ahogar sus tristezas en los lugares que estaban permitidos, cuando ir a terapia no era...

Acerca de mí

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Me apasiona escribir y compartir mis emociones y pensamientos con los demás, pienso que eso enriquece mi propio aprendizaje, soy alguien con una mente curiosa y tenaz.